¡La leyenda de leprechaun! No hay nada más irlandés que eso, ¿verdad? A no ser que hayas vivido en un agujero o en el tronco de un árbol (como nuestros pequeños amigos zapateros), probablemente hayas oído que estos pequeños embaucadores tienen bastante suerte.
Tanto si has visto un duende en los juegos de casino online, como si has visto a alguien ridículo disfrazado de uno, probablemente te preguntes cómo han llegado a existir estos pequeños y astutos personajes.
Vamos a adentrarnos en las profundidades de la tradición de los duendes y a contarte algunas curiosidades que quizá no conozcas sobre nuestros diminutos amigos barbudos.
La antigua historia de Leprechaun
En primer lugar, hay que saber que, antaño, los irlandeses creían que los duendes y otras criaturas míticas eran reales. En 1989, un hombre afirmó haber encontrado los restos de uno en un pozo de los deseos en una montaña llamada Slieve Foye (que resulta ser el punto más alto del condado de Louth, Irlanda). Lo que se encontró fueron huesos, un pequeño traje y monedas, que ahora se pueden ver detrás de una vitrina en el Anchor Bar de Carlingford (conocido localmente como PJ’s).
Sin embargo, la mayoría de los mortales estaremos de acuerdo en que los duendes son un mito entrañable y, según el libro The Element Encyclopedia of Magical Creatures (La Enciclopedia Elemental de las Criaturas Mágicas), de John y Caitlin Matthews, la leyenda comenzó en el siglo VIII. Los espíritus del agua de esta época se llamaban luchorpán, que significa «cuerpo pequeño». Estas historias evolucionaron hasta convertirse en los cuentos que tenemos hoy en día sobre los duendes. Y en el folclore moderno, no les gusta precisamente el agua. (¡Han cambiado tanto durante el transcurso de los siglos!)
Otra idea sobre el origen de los duendes es que son descendientes de los Tuatha Dé Danann, un grupo de seres mágicos que servían a la diosa gaélica Danu. Al parecer, habitaban las verdes colinas de la Isla Esmeralda mucho antes que el hombre.
Los duendes forman técnicamente parte de la familia de las hadas, pero no te imagines con ello a una simpática hada revoloteando. Las hadas irlandesas son bastante diferentes a las que estamos acostumbrados, y la mayoría se caracterizan por ser unos bichos bastante sarcásticos y propensos a los trucos.
¿De dónde sacan el dinero?
Si hay algo que sabemos de los duendes es que siempre parecen tener un montón de dinero. La forma en que son tan ricos es objeto de muchas interpretaciones. La primera creencia, y la más extendida, es que son zapateros de gran talento y que su nombre deriva de la frase irlandesa leath bhrogan, que significa «zapatero». Se dice que se les puede oír venir desde lejos por el golpeteo revelador de sus zapatos (¡así que presta atención!).
No estamos seguros de si ser un zapatero mítico va acompañado de un sueldo tan elevado o si la profesión ya no es tan rentable como antes, pero estamos de acuerdo en que probablemente hagan algún trabajo extra.
Algunas historias afirman que los duendes son los protectores de la riqueza de la dinastía de las hadas, lo que explicaría en cierta medida la olla de oro de la que siempre oímos hablar. Otros creen que son banqueros y que están ahí para asegurarse de que las otras hadas -conocidas por su frivolidad- no se gasten todo el dinero que les ha costado ganar en tonterías.
¿Cómo puedes hacerte con algo de su dinero?
Ahora, la pregunta más importante que casi todo el mundo se hace es ¿cómo se puede conseguir exactamente el oro del duende? Bueno, si fuera fácil, no valdría la pena, ¿verdad?
Lo primero es lo primero: te vas a llevar una gran decepción y lo más probable es que sufras de hipotermia si intentas encontrar una olla de oro al final del arco iris (y de todas formas, ¿en qué extremo deberíamos buscar: el izquierdo o el derecho?). Esto es solo una distracción para mantener a aquellos humanos codiciosos lejos de su recompensa.
Una de las formas de conseguir algunas de las riquezas de los duendes es atrapar uno. Es un poco más fácil de lo que parece (ejem), y no te sorprenderá saber que los irlandeses llevan años perfeccionando las trampas para duendes. El truco consiste en que, una vez que los atrapes, te concederán tres deseos por su libertad… ¡Pero no te olvides de usar uno para pedir dinero!
Aunque no lo creas, también puedes conseguir parte del oro de los duendes siendo amable. Hay una famosa historia antigua sobre un noble que tenía mala suerte: le dio a un duende un paseo en su caballo. Cuando volvió a su castillo, éste estaba lleno de oro. Esto demuestra que de vez en cuando merece la pena ser amable…
Datos curiosos sobre los leprechauns
Han pasado por un cambio de vestuario
Antiguamente, los duendes solían ir vestidos de rojo y con un sombrero rojo, antes de que el verde se convirtiera en el color preferido. Tal vez les preocupaba confundirse con otro hombre mítico, barbudo y de estatura rechoncha, conocido por su vestimenta roja.
Los leprechauns están protegidos
Se dice que 236 de nuestros hermanos bajitos y barbudos siguen viviendo en las cavernas de Slieve Foye, en el condado de Leath. Por ello, en 2009 la Unión Europea declaró la zona patrimonio de la humanidad. Los duendes tienen ahora un pequeño y encantador santuario al que llamar hogar, junto con todos los animales y plantas de la zona.
Tienen un primo
Los duendes tienen un primo aún más travieso, conocido como clurichaun. Estos pequeños y astutos personajes son conocidos por su mal humor, ya que robar en las bodegas es una de sus actividades favoritas. Algunas historias sugieren que no son más que duendes nocturnos que se desatan después de un duro día de trabajo. Tendremos que preguntar al próximo duende que encontremos para llegar al fondo del asunto.
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